15 mayo, 2006

Recuerdos II



Joel: Realmente necesito irme. Debería seguir mi camino.
 
Clementine: Entonces andate.
 
Joel: Lo hice. Salí por la puerta. Estaba demasiado nervioso. Pensé que quizás eras una loca. Pero eras excitante. Me sentí como un nenito asustado.
 
Clementine: ¿Estabas asustado?
 
Joel: Sii. Pensé que te dabas cuenta. Volví corriendo hacia la fogata, tratando de ganarle a mi humillación.
 
Clementine: ¿Fue por algo que dije?
 
Joel: Si, dijiste “entonces andate”. Y lo dijiste con tanto desdén.
 
Clementine: Oh, lo siento.
 
Joel: Está bien.
 
Clementine: Yo quería que te hubieras quedado.
 
Joel: Yo también quisiera haberme quedado. Juro por Dios que quisiera haberme quedado Quisiera haber hecho un montón de cosas... Ojalá me hubiera quedado.
 
Clementine: Joely ¿Y si esta vez te quedás?
 
Joel: Salí por la puerta. No hay más recuerdos.
 
Clementine: Volvé e inventá una despedida por lo menos. Hacé como que tuvimos una.


Clementine: Eso es todo, Joel. Se va a borrar pronto.
 
Joel: Lo sé.
 
Clementine: ¿Qué hacemos?
 
Joel: Disfrutarlo.

1 comentario:

Marxe dijo...

Si, es una de las últimas escenas, cuando siente que pierde la batalla por retener recuerdos.
Puede ser que el blog tenga algún matiz melancólico quizás, pero a veces los desgarros o las tristezas son las que más impulso dan a tranfromarlas en otra cosa.
Salutti.