W.B. Tholen (1895)
A veces lamento no poder recuperar esa capacidad de lectura cándida. Muy de vez en cuando, me la devuelve, como un resabio de juventud que hubiese creído inalcanzable, un autor cuyo nombre ignoraba, un libro llegado casi por azar a mi lectura. Es, siempre, el principio de una fidelidad.
Edgardo Cozarinsky
Los libros y la calle
No hay comentarios.:
Publicar un comentario