14 mayo, 2019

Morder el anzuelo





Aunque el rechazo al consumismo y a la tecnocracia fueron tópicos de la contracultura, teníamos demasiados deseos manipulables y fuimos seducidos por la colosal innovación y expansión técnica que produjo mercancías y prácticas sociales a lo grande. Seducidos y/o incapaces de resistir la avalancha. Yo también mordí el anzuelo. El de esa cortina invisible que flota en el océano global por el que nadamos a la deriva entre empresas monopólicas que nos atrapan y aplastan como pescados en las redes de arrastre, burlándose de los discursos y prácticas comunitarias, autonomistas, libertarias de altri tempi. Esas empresas nos ofrecen sus carnadas, sus ilusiones de magos: fama, prestigio, poder, dinero. Hay algo en lo que tiene razón: el capitalismo está en y entre nosotros, no allá afuera.

Osvaldo Baigorria
Postales de la contracultura. 

Un viaje a la costa oeste (1974-1984)

2 comentarios:

Loli dijo...

Me encanta tu blog. Y me encantan las lecturas que compartís.

(Borré el comentario anterior porque me lo cargó desde mi cuenta bue -la del laburo -)

Marxe dijo...

Gracias Loli!