26 diciembre, 2007

Amigos (9)

Jude Law, Kate Winslet y Mark Ruffalo en


Tardé hasta el verano en que cumplí dieciséis años en encontrar verdaderos amigos. Algo patético, lo sé. Pero yo siempre era difrente, más difrente de lo que podía imaginar, y tal vez sólo tenía que esperar a que la clase adecuada de difrente se cruzara en mi camino. También seguía asustado, realmente asustado en lo más profundo de mi ser, de modo que quien quiera que fuera el difrente tenía que ser amable. Quiso el destino que mis primeros amigos fueran tan difrentes de mí como podrían imaginar, al menos eso era lo que pensaban mis padres. Los mexicanos, igual que los negros, igual que los indios. Tal vez por eso funcionó. Por eso, y porque tenían un caracter afable. Flaco y Acho. Fueron los primeros ojos que encontré, desde los de mi madre, en los que pude reconocer algo de mí.

Tom Spanbauer
Ahora es el momento

23 diciembre, 2007

el sueño de dios



La vida y el mundo son el sueño de un Dios ebrio, que escapa silencioso del banquete divino y se va a dormir a una estrella solitaria, ignorando que crea cuanto sueña... Y las imágenes de ese sueño se presentan, ahora con una abigarrada extravagancia, ahora armoniosas y razonables... La Iliada, Platón, La Batalla de Maratón, La Venus de Medicis, el Munster de Estrasburgo, La Revolución Francesa, Hegel, los barcos de vapor, son pensamientos desprendidos de ese largo sueño. Pero un día el Dios despertará frotándose los ojos adormilado, sonreirá, y nuestro mundo se hundirá en la nada sin haber existido jamás...

Heinrich Heine
Cuadros de Viaje

18 diciembre, 2007

Máscaras


- Ichabod Crane: Una lección dura en un mundo duro, y es mejor que la aprenda, joven Masbath. Los villanos usan muchas máscaras, y ninguna tan peligrosa como la máscara de la virtud.


Johnny Depp y Marc Pickering en
La leyenda del jinete sin cabeza - Tim Burton
(Sleepy Hollow, 1999)

- Ichabod Crane: It's a hard lesson for a hard world, and you had better learn it, Young Masbath. Villainy wears many masks, none so dangerous as the mask of virtue.

16 diciembre, 2007

Ah, el amor (11)


Gustav Klimt - El beso


El amor está siendo muy desacralizado y hasta ridiculizado, y creo que lo que sucede es que la gente tiene pocas experiencias de amor, porque las experiencias del amor no se repiten mucho. Es tan poco natural el amor que no se repite mucho en la vida. Cuando uno “padece” de amor no vuelve a ser virgen. Es difícil enamorarse de esa manera más de una vez en la vida. Pareciera que el espíritu no puede hacer ese gran esfuerzo muchas veces.

Indio Solari

Extraído de este reportaje

14 diciembre, 2007

Sabio


Ernst Fuchs - Moisés ante los espinos ardientes (1956)


-Luisa Corradini: ¿Y cómo perder el miedo a la muerte?

-Luc Ferry: Una fórmula estoica que me gusta mucho dice: "Sabio es aquel que lamenta un poco menos, que espera un poco menos y que ama un poco más". Nietzsche retomará esa bella idea y la llamará "la inocencia del devenir". En pocas palabras, el sabio consigue reconciliarse con la vida cuando deja de relativizar el presente con los recuerdos del pasado o con las expectativas del porvenir. En toda su historia, desde los estoicos hasta Nietzsche, la filosofía está atravesada por una misma problemática: tratar de aprender a vivir mejor.

de la entrevista publicada en ADN La Nación



12 diciembre, 2007

Mundo prestado

Salió a la luz gris y se quedó allí de pie y fugazmente vio la verdad absoluta del mundo. El frío y despiadado girar de la tierra intestada. Oscuridad implacable. Los perros ciegos del sol en su carrera. El aplastante vacío negro del universo. Y en alguna parte dos animales perseguidos temblando como zorros escondidos en su madriguera. Tiempo prestado y mundo prestado y ojos prestados con que llorarlo.




He walked out in the gray light and stood and he saw for a brief moment the absolute truth of the world. The cold relentless circling of the intestate earth. Darkness implacable. The blind dogs of the sun in their running. The crushing black vacuum of the universe. And somewhere two hunted animals trembling like ground-foxes in their cover. Borrowed time and borrowed world and borrowed eyes with which to sorrow it.

Cormac McCarthy
La Carretera (The Road)

05 diciembre, 2007

Tú florece

Ando Hiroshige - Campo de Ciruelos (Kameido, 1857)


Ciruelo de mi puerta
si no volviese yo
la primavera siempre
volverá.
Tú, florece.

Poema tradicional japonés

01 diciembre, 2007

Ah, el amor (10)

Egon Schiele


El amor me destroza. Incluso cuando estoy tranquilo, temo perder la tranquilidad y esa preocupación me impide disfrutar. El menor rasguño estropea la pieza entera. Me resulta imposible no pensar en lo peor. Pierdo los estribos cuando en realidad sólo es un traspié. La espera se convierte en un suplicio; también la posesión, porque me abruma el miedo a perder lo que tengo.

Jean Cocteau
El Libro Blanco

29 noviembre, 2007

Océano Mar (11)

Alexander-Louis Leloir - Jacob luchando con el ángel (1865)

...mientras Langlais dejaba que su mente huyera por los rumbos de un navío que se voló, literalmente, en las aguas de Malagar, y Adams resolvía detenerse frente a una rosa de Borneo para espiar el esfuerzo de un insecto que intentaba subirse por uno de sus pétalos hasta el momento de renunciar a la empresa y volar lejos, en esto semejante y solidario con el navío que había tenido el mismo instinto al remontar las aguas de Malagar, ambos hermanos en el implícito rechazo de la realidad y en la decisión de aquella aérea fuga, y unidos, en aquel instante, por ser imágenes que se habían grabado simultáneamente en las retinas y en las memorias de dos hombres que nada podría volver a separar y que justamente a esos dos vuelos, de insecto y de navío, entregaban en el mismo instante la misma angustia por el sabor acre del final y el desconcertante descubrimiento de lo silencioso que es el destino cuando, de repente, estalla.

Alessandro Baricco
Océano Mar

22 noviembre, 2007

Dust Storm

Farmer and sons walking in the face of a dust storm.
Cimarron County, Oklahoma.
- Arthur Rothstein (1936)

Library of Congress, Prints & Photographs Division, FSA-OWI Collection, LC-DIG-ppmsc-00241 DLC.


Hoy estoy feliz. Después de mucho tiempo de buscar y rebuscar por todos lados finalmente encontré esta fotografía que es una de las más bellas con las que me he topado. La ví por primera vez en una revista norteamericana que cayó por casualidad en mis manos y cometí la torpeza de no registrar sus datos. La encontré hoy casi de milagro. Ojalá les guste tanto como a mí, aunque sé que es algo muy personal.

17 noviembre, 2007

Rodéense de personas que los quieran


Nicoletta Ceccoli - Cuervos


Claudine Moulard -Usted dedica tiempo a alentar a jóvenes escritores, ¿qué consejos les da?

Ray Bradbury -Lo que funda toda escritura es el amor, es hacer lo que amamos y amar lo que hacemos. Y olvidarse del dinero. En mis comienzos, yo ganaba 30 dólares por semana, y mi novia era rica, pero le pedí que hiciera voto de pobreza para casarse conmigo. No teníamos ni auto ni teléfono, vivíamos en un departamento pequeño en Venice, pero la estación de servicio de enfrente tenía una cabina telefónica. Iba corriendo a atender cuando sonaba y la gente creía que me llamaba a mi oficina. Yo les repito: Rodéense de personas que los quieran, y si no los quieren, échenlos. No hay necesidad de ir a la Universidad, donde no se aprende a escribir. Vayan más bien a las bibliotecas. Yo escribí Fahrenheit 451 porque había oído hablar del incendio de la biblioteca de Alejandría y de los libros quemados por Hitler en Berlín.

[extraído de "El escritor que amó a Marte", revista Ñ]

Beat bop



211th Chorus


The wheel of the quivering meat conception
Turns in the void expelling human beings,
Pigs, turtles, frogs, insects, nits,
Mice, lice, lizards, rats, roan
Racinghorses, poxy bubolic pigtics,
Horrible, unnameable lice of vultures,
Murderous attacking dog-armies
Of Africa, Rhinos roaming in the jungle,
Vast boars and huge gigantic bull
Elephants, rams, eagles, condors,
Pones and Porcupines and Pills-
All the endless conception of living beings
Gnashing everywhere in Consciousness
Throughout the ten directions of space
Occupying all the quarters in & out,
From super-microscopic no-bug
To huge Galaxy Lightyear Bowell
Illuminating the sky of one Mind-
Poor! I wish I was free
of that slaving meat wheel
and safe in heaven dead

Jakc Kerouac
(de Mexico City Blues)

07 noviembre, 2007

Tao


TAO TE CHING
Capítulo VIII

La bondad más elevada es como el agua.
El agua beneficia a todas las cosas
pero no lucha.
Permanece en lugares que otros desprecian.
Es por esto que está cercana al Tao.
En cuanto a la morada,
busca un buen lugar para vivir;
en cuanto al sentimiento, amplía tu corazón;
en cuanto a la amistad, conserva
buenas relaciones con todos los hombres;
respecto de las palabras, ten confianza;
al gobernar, respeta el orden;
en los negocios, no te exaltes;
para moverte, espera el tiempo oportuno.
Al no haber lucha, no hay reproche.

Lao Tzu
[traducción de Ch'u Ta-Kao]

Loco


Francis Bacon - Autorretrato


When we remember we are all mad
the mysteries disappear
and life stands explained.

Mark Twain

31 octubre, 2007

Macedonio por Lukas


CREÍA YO

No a todo alcanza Amor, pues que no puedo
romper el gajo con que Muerte toca.
Mas poco Muerte puede
si en corazón de Amor su miedo muere.
Mas poco Muerte puede, pues no puede
entrar su miedo en pecho donde Amor.
Que Muerte rige a Vida; Amor a Muerte.

Macedonio Fernández

27 octubre, 2007

Una de piratas



Barbossa
: el mundo solía ser un lugar más grande

Jack Sparrow: el mundo es el mismo de siempre - es sólo que quedan menos cosas.


Una isla sin un clavel

Ivan Shishkin - Lluvia en el robledal (1891)


Oda a una larga tristeza

Quisiera cantar una larga tristeza que no olvido, una dura
lengua. ¡Cuantas veces!

En mi país el otoño nace de una flor seca,
de algunos pájaros; a veces creo que de mi nuca abandonada
o del vaho penetrante de ciertos ríos de la llanura,
cansados del sol, de la gente que a sus orillas
goza una vida sin majestad.

Cuando se llega para vivir con unos sacos de carbón y se siente que la piel
se enseñorea de hastío,
de repugnante soledad; que el ser es una isla sin un clavel,
se desea el otoño, el viento que come las hojas
como a las almas; el viento
que inclina sin pesadez las embriagadas hierbas,
para envolverlas en el consuelo de la muerte.

No; no quisiera volver jamás a la tierra;
me duele toda la carne, y donde ha habido un beso me arde el aire.
En el verano florido he visto un caballo azulado y un toro transparente
beber en el pecho de los ríos, inocentes, su sangre;
los árboles de las venas, llenos, perdidos en los laberintos tibios del cuerpo,
en la ansiosa carne oprimida. En el verano.
Mis días bajaban por la sombra de mi cara
y me cubrían el vientre, la piel pura, rumorosa,
envueltos en la claridad, más dulce.
Como un demente, ensordecido, inagotable,
quebraba la rosa el junco, el agitado seno deslumbrante.
Sin velos, en el vacío descansa indiferente un día sin pensamiento,
sin hombre, con un anochecer que llega con una espada.

Un sucio resplandor me quema las flores del cielo,
las grandes llanuras majestuosas.
Quisiera cantar esta larga tristeza desterrada,
pero, ay, siento llegar el mar hasta mi boca.
Ricardo Molinari

25 octubre, 2007

Océano Mar (10)

Io ti ho amato, André, e non saprei immaginare come si possa amare di più. Avevo una vita, che mi rendeva felice, e ho lasciato che andasse in pezzi pur di stare con te. Non ti ho amato per noia, o per solitudine, o per capriccio. Ti ho amato perché il desiderio di te era più forte di qualsiasi felicità. E lo sapevo che poi la vita non è abbastanza grande per tenere insieme tutto quello che riesce a immaginarsi il desiderio. Ma non ho cercato di fermarmi, né di fermarti. Sapevo che lo avrebbe fatto lei. E lo ha fatto. È scoppiata tutto d’un colpo. C’erano cocci ovunque, e tagliavano come lame. Poi sono arrivata qui. E questo non è facile da spiegare. Mio marito pensava fosse un posto dove guarire. Ma guarire è una parola troppo piccola per ciò che succede qui. È semplice. Questo è un posto dove prendi commiato da te stesso. Quello che sei ti scivola addosso, a poco a poco. E te lo lasci dietro, passo dopo passo, su questa riva che non conosce tempo e vive un solo giorno, sempre quello. Il presente sparisce e tu diventi memoria. Sgusci via da tutto, paure, sentimenti, desideri: li custodisci, come abiti smessi, nell’armadio di una sconosciuta saggezza, e di un’insperata pace. Riesci a capirmi? Riesci a capire come tutto questo - sia bello?

Alessandro Baricco
Oceano Mare


Marxe - Mar del Sur, Enero 2006

Yo te he amado, André, y no sabría imaginar cómo podría amarse más. Tenía una vida que me hacía feliz, y he dejado que se hiciera pedazos con tal de quedarme contigo. No te he amado por tedio, o por soledad, o por capricho. Te he amado porque el deseo de ti era más fuerte que cualquier felicidad. Y sabía bien que luego la vida no es lo suficientemente grande como para mantener unido todo lo que el deseo consigue imaginar. Pero no he tratado de detenerme, ni de detenerte. Sabía que la vida lo haría. Y lo hizo. Ha estallado de golpe. Había pedazos por todas partes, y cortaban como cuchillas. Luego he llegado aquí. Y esto no es fácil de explicar. Mi marido pensaba que era un lugar para curarse. Pero curarse es una palabra demasiado pequeña para lo que sucede aquí. Y demasiado sencilla. Este es un lugar donde te despides de ti mismo. Lo que eres se resbala de ti poco a poco. Y lo dejas atrás, un paso tras otro, en esta orilla que no conoce tiempo y vive un solo día, siempre el mismo. El presente desaparece y tú te vuelves memoria. Te escurres lejos de todo, miedos, sentimientos, deseos: los guardas, como trajes desechados, en el ropero de una desconocida sabiduría y de una inesperada paz. ¿Puedes entenderme? ¿Puedes entender cómo todo esto -es hermoso?

Alessandro Baricco
Océano Mar

23 octubre, 2007

Aleluya


Siempre pienso que el instrumento más hermoso es la voz humana.
El sábado pude confirmarlo una vez más.
Sencillamente, hermoso.

18 octubre, 2007

Autorretrato

Edward Hopper - Habitaciones junto al mar (1955)


Habitaciones Separadas

Está solo. Para seguir camino
se muestra despegado de las cosas.
No lleva provisiones.

Cuando pasan los días
y al final de la tarde piensa en lo sucedido,
tan sólo le conmueve
ese acierto imprevisto
del que pudo vivir la propia vida
en el seguro azar de su conciencia,
así, naturalmente, sin deudas ni banderas.

Una vez dijo amor.
Se poblaron sus labios de ceniza.

Dijo también mañana
con los ojos negados al presente
y sólo tuvo sombras que apretar en la mano,
fantasmas como saldo,
un camino de nubes.

Soledad, libertad,
dos palabras que suelen apoyarse
en los hombros heridos del viajero.

De todo se hace cargo, de nada se convence.
Sus huellas tienen hoy la quemadura
de los sueños vacíos.

No quiere renunciar. Para seguir camino
acepta que la vida se refugie
en una habitación que no es la suya.
La luz se queda siempre detrás de una ventana.
Al otro lado de la puerta
suele escuchar los pasos de la noche.

Sabe que le resulta necesario
aprender a vivir en otra edad,
en otro amor,
en otro tiempo.

Tiempo de habitaciones separadas

Luis García Montero(Granada, España, 1958)

15 octubre, 2007

Eso

Andrea Boschin - Fantasma en la niebla


Ser alguien es soledad.
Antonio Porchia


11 octubre, 2007

el viudo lamentar



Fabricame una máscara

Fabricame una máscara y un muro que detenga a tus espías
de penetrantes ojos esmaltados y garras telescópicas,
estupro y rebelión en las habitaciones de los niños de mi rostro;
una mordaza de árbol caído que sujete a enemigos desnudos,
a la lengua de bayoneta en este rezo desguarnecido
a la boca presente, y a la dulce trompeta del engaño;
ataviada en antigua armadura, y en roble, la aprobación de un tonto,
para usarla de escudo contra la inteligencia esplendorosa,
y sembrar confusión entre los jueces examinadores;
y el viudo lamentar, manchado por las lágrimas,
curvado al descender por las pestañas
para disimular la belladonna y que los ojos secos perciban
cómo otros traicionan las mentiras plañideras de sus pérdidas
con el doblez de la desnuda boca o la risa en la manga.

Dylan Thomas

10 octubre, 2007

Tallando

Misha Gordin - Multitud


Somos como escultores,
constantemente tallando en los demás imágenes que
anhelamos, necesitamos o deseamos,
a menudo en contra de la realidad,
contra su beneficio, y siempre, al final,
un desengaño,
porque no se ajusta a ellos.

Anaïs Nin

09 octubre, 2007

Despertad gente tierna

Comparados la importancia, complejidad de los movimientos de su mecanismo, de una dínamo, un automóvil, una máquina cualquiera de fábrica, con el operario que la maneja, se debe decir que éste es accionado por aquella. La máquina y el automóvil (un ómnibus, con recorrido y horario fijos) tienen una función que han de realizar: para ello necesitan quien la maneje o conduzca. Ese elemento, el humano, es de incomparable menor importancia. Sólo puede inducirnos a error el hecho de que éste es un hombre y aquella un artefacto.
Pero el sometido es el hombre, el parásito, el accesorio. La función no está hecha para el hombre, sino para la máquina, como en los martillos mecánicos, la acción de remachar es lo importante, y eso nada tiene que ver con el hombre, sino con el trabajo; o el torno.



Ezequiel Martínez EstradaEl sentido de la paradoja
 

Wayne Anderson


Se sabe, a la libra de fuerza, lo que rendirá el motor; pero ni todos los calculistas juntos de la casa de la deuda nacional pueden decir qué capacidad tiene en un momento dado, para el bien o para el mal, para el amor o el odio, para el patriotismo o el descontento, para convertir la virtud en vicio, o viceversa, el alma de cada uno de estos hombres que sirven a la máquina con caras impasibles y ademanes acompasados. En la máquina no hay misterio alguno; hay un misterio que es y será insondable para siempre en el más insignificante de estos hombres... ¿Por qué, pues, no hemos de reservar nuestra aritmética para los objetos materiales, recurriendo a otra clase de medios para gobernar estas asombrosas cualidades desconocidas?

Charles Dickens
Tiempos difíciles

06 octubre, 2007

Escapes

M.C.Escher - Ojo


La lectura fue para mí una amistad, un salvataje integral. Yo abría un libro, cerraba escotillas a mi alrededor y estaba en el mundo que el libro me proponía.

Michel Onfray


de quien hoy se publicó un interesante reportaje aquí.

03 octubre, 2007

Aullidos

foto: Ewolman

Tu vida no ha de ser superficial y tonta, porque sepas que tu lucha ha de ser estéril. Es mucho más superficial, Harry, que luches por algo bueno e ideal y creas que has de conseguirlo. ¿Es que los ideales están ahí para que los alcancemos? ¿Vivimos nosotros los hombres para suprimir la muerte? No; vivimos para temerla, y luego, para amarla, y precisamente por ella se enciende el poquito de vida de modo tan bello durante una hora.

Hermann Hesse
El lobo estepario

29 septiembre, 2007

Tiempos sin poesía

Pero aquella fraternidad, la de los hombres en guerra, nunca más volverían a sentirla. Era como si remotas razones del corazón se hubieran liberado para ellos bajo el abrigo del sufrimiento, descubriéndolos capaces de sentimientos maravillosos. Sin decírselo, se querían, y ésa les parecía, simplemente, la mejor parte de sí mismos: la guerra la había liberado. Era, por otra parte, justamente eso lo que habían ido a buscar, cada uno a su manera, al realizar ese gesto hoy incomprensible que había sido querer la guerra. Todos habían respondido, instintivamente, a una precisa voluntad de escaparse de la anemia de su juventud –querían que se les devolviera la mejor parte de sí mismos. Estaban convencidos de que existía, pero que era prisionera de tiempos sin poesía.


Sergei Mikhailovich Prokudin-Gorskii
Primera Guerra Mundial - 1915 - prisioneros austríacos

Era así como se encontraban con aquella especie de fraternidad, y era eso lo que habían buscado. Era la muerte, y el miedo, lo que les hacía sentir de esa forma -sin duda alguna- pero también tenía algo que ver aquella ausencia, hasta donde alcanzaba la vista, de niños y mujeres -una situación surrealista de la que ellos deducían una euforia bastante particular, casi fundacional. Allí donde no hay ni hijos ni madres, tú eres el Tiempo, sin antes ni después. Y allí donde no hay ni amantes ni esposas, tú eres de nuevo animal, e instinto, y puro estar. Experimentaban la primitiva sensación de ser, simplemente, machos -algo que tal vez hubieran notado apenas en los ritos de compañerismo de la adolescencia, o en fugaces veladas en un burdel. En la guerra todo era más verdadero, y completo, ya que en el obligado gesto de luchar esa identidad pura de animales machos hallaba su consumación y, por decirlo de algún modo, se cerraba sobre sí misma, dibujando la inabordable figura de una esfera perfecta. Eran machos, liberados de cualquier responsabilidad procreativa, y desligados del Tiempo. Luchar -eso no parecía ser más que una consecuencia.

Dado que, por regla general, no es posible percibir con tal pureza la simplicidad absoluta de una identidad propia, muchos consiguieron una ebriedad eufórica y una inesperada consideración hacia sí mismos. Compartían, al margen de la cotidiana atrocidad de la trinchera, esa sensación de que se trataba de vida en estado puro, de formaciones cristalinas de una humanidad llevada a su primitiva simplicidad. Diamantes, heroicos. Esa sensación no se la podrían haber explicado a nadie, pero cada uno de ellos la reconocía en la mirada del otro, como en un espejo -y así la hacía suya, y era el secreto en el que cimentaban su propia camaradería. Nada habría podido romperla. Era la mejor parte de ellos, y nadie se la arrebataría.

Durante mucho tiempo, más adelante, los supervivientes la buscarían en la vida normal, en los días de paz, pero sin hallarla. Tanto fue así que al final llegarían a reconstruirla, en laboratorio, en la fraternidad de una utopía política que elevaba sus recuerdos a ideología, y militarizaba la paz, y las almas, buscando, por caminos atroces, la parte mejor de todos. Entregaron así a buena parte de Europa la experiencia de los fascismos -muchos creían honestamente que estaban enseñando en sus aldeas la pureza que habían aprendido en las trincheras. Pero la geométrica precisión con que ese experimento los acabó llevando a otra guerra -falenas hacia la luz- explica ante los ojos de la posteridad lo que ellos tal vez supieran, pero no querían admitir: que sólo en el olor del matadero podría llegar a hacerse real lo que para ellos era recuerdo y sueño. Cómo seres humanos avisados hayan podido entrar en guerra nuevamente, veintiún años después de la Primera Guerra Mundial, y muchos de ellos en el arco de una misma vida, es algo que debe hacemos reflexionar sobre lo muy deslumbrante que debió de ser, allí en la podredumbre de las trincheras de la Somme o del Carso, aquella sensación de fraternidad primordial -se diría que era el anuncio de una humanidad verdadera. No fue posible abstenerse de aguardarla en cuanto hubo estallado la paz.
Pero la paz, eso sí que era algo complicado.

Alessandro Baricco
Esta Historia

27 septiembre, 2007

Milagros

I.Antronopoulos - Sunshine


A un olmo seco

Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo,
algunas hojas verdes le han salido.
¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.
No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.
Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.
Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas de alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas,
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.

Soria, 1912

Antonio Machado

25 septiembre, 2007

Sacerdote soberbio

Sandor Marai en Budapest

Sí, Endre había envejecido durante los últimos tres o cuatro años. Todo lo que era pesado y grave en su carácter y en su naturaleza -esa resistencia oculta contra el mundo que no permitía que la gente se le acercara, su actitud de sacerdote soberbio, su manía de observar a la gente sin decir palabra y que lo caracterizaba desde joven, le impedía prácticamente el contacto con los desconocidos. No actuaba como un misántropo, pero la gente se sentía incómoda a su lado. Era como si supiera algo del mundo, algo que estuviera contra la ley, y conservara ese conocimiento para sí mismo. Hasta su bondad era pesada, tímida y torpe.
Endre miraba a Lajos como alguien que lo sabe todo, como alguien que no quiere juzgar, ni tampoco perdonar. El «pues, Lajos» con el que lo había saludado, después de veinte años, no había sido ni condescendiente ni vanidoso ni severo, pero me di cuenta de que Lajos se volvía inseguro tras aquellas palabras; que miraba a su alrededor, nervioso; que hablaba más deprisa; que se limpiaba el sudor de la frente con un pañuelo. Creo que hablaron de política o de la cosecha. Endre se encogió de hombros, como si ya hubiese visto y oído lo suficiente, se sentó en el banco de piedra y juntó las manos sobre la barriga, con un gesto característico de las personas mayores. Durante el resto del día no le dijo nada más a Lajos, hasta bien entrada la tarde, hasta el momento en que se puso a redactar el documento en el que yo autorizaba a Lajos a vender la casa.

Sandor Marai
La herencia de Eszther

21 septiembre, 2007

Macedonio (5) - Esplendor de soledad

Macedonio Fernández

Oh, ser así mirado, en ese esplendor de soledad de dos que es el amor, único sentido y sentido perfecto del mundo, sin el cual la vida es una horrible absorción de días. Oh, ser mirado así no lo espero otra vez. Y ¿entonces, pues...? Miseria de cobardía, vicio de vivir.

Macedonio Fernández
Una Novela Que Comienza

20 septiembre, 2007

Soy

Walt Whitman en 1887, por George C. Fox

XX

¿Quién va allí?
Grosero, hambriento, místico, desnudo...
¿quién es aquel?
¿No es extraño que yo saque mis fuerzas de la carne del buey?
Pero ¿qué es un hombre en realidad?
¿Qué soy yo?
¿Qué eres tu?

Cuanto yo señale como mío,
debes tú señalarlo como tuyo,
porque si no pierdes el tiempo escuchando mis palabras.
Cuando el tiempo pasa vacío y la tierra no es más
que cieno y podredumbre
no me puedo parar a llorar.
Los gemidos y las plegarias adobadas con polvos
para los inválidos;
y la conformidad , para los parientes lejanos.
Yo no me someto.
Dentro y fuera de mi casa me pongo el sombrero
como me da la gana.

¿Por qué he de rezar?
¿Por qué he de inclinarme y suplicar?

Después de escudriñar en los estratos,
después de consultar a los sabios,
de analizar y precisar
y de calcular atentamente,
he visto que lo mejor de mi ser está agarrado a mis huesos.

Soy fuerte y sano.
Por mí fluyen sin cesar todas las cosas del universo.
Todo se ha escrito para mí
y yo tengo que descifrar el significado oculto de las escrituras.

Soy inmortal.
Sé que la órbita que describo no puede medirse
con el compás de un carpintero,
y que no desapareceré como el círculo de fuego
que traza un niño en la noche con un carbón encendido.

Soy sagrado.
Y no torturo mi espíritu ni para defenderme
ni para que me comprendan.
Las leyes elementales no piden perdón.
(Y después de todo, no soy más orgulloso que los cimientos
sobre los cuales se levanta mi casa).

Así como existo ¡Miradme!
Esto es bastante.
Si nadie me ve, no me importa,
y si todos me ven, no me importa tampoco.
Un mundo me ve,
el más grande de todos los mundos : Yo.
Si llego a mi destino ahora mismo,
lo aceptaré con alegría,
y si no llego hasta que transcurran diez millones de siglos,
esperaré ... esperaré alegremente también.
Mi pie está empotrado y enraizado sobre granito
y me río de lo que tú llamas disolución.
porque conozco la amplitud del tiempo.

Walt Whitman
Canto a mí mismo

17 septiembre, 2007

Ser humano

Hiroshima

Mientras avanzábamos por entre los heridos, no nos dirigieron ni una sola mirada de reproche. Hicieron caso omiso de nosotros. Nuestra existencia había quedado olvidada, borrada, por no haber compartido sus desdichas. Para ellos no éramos más que sombras.A pesar de eso, sentí que algo llameaba en mi interior. Los sufrimientos que mis ojos veían sirvieron para darme audacia, para fortalecerme. Sentía la misma excitación que una revolución produce. Aquellos seres sufrientes habían visto cómo el fuego destruía cuantas pruebas pudiera haber de su existencia como seres humanos. Sus ojos habían visto que las relaciones humanas, los amores, los odios, la razón, el derecho a la propiedad, todo se convertía en llamas. Y, en aquel momento, no lucharon contra las llamas, sino que lucharon contra las relaciones humanas, contra los amores y los odios, contra la razón, contra el derecho de propiedad. En aquel momento, al igual que la tripulación de un buque que se hunde, se hallaron en una situación en que estaba permitido matar a una persona para salvar a otra. El hombre que murió intentando salvar a la mujer que amaba no fue muerto por las llamas, sino por su amada. Y fue el hijo, y sólo el hijo, el que asesinó a su madre, cuando intentó salvarlo. Las circunstancias en que se encontraron y contra las que lucharon -circunstancias de una vida a cambio de una vida- probablemente fueron las circunstancias más elementales y más universales en que la humanidad puede hallarse. En sus semblantes vi rastros del agotamiento que produce el ser testigo de un drama sangriento. Aunque sólo un segundo, sentí que desaparecían todas mis dudas en lo referente al requisito fundamental de la hombría. El pecho me ardía con ansias de gritar. Quizá si hubiese tenido más capacidad para comprenderme a mí mismo, si hubiese recibido el don de ser un poco, se hubiera podido examinar más profundamente aquel requisito y comprender el verdadero significado de mí mismo, como ser humano.

Yukio Mishima
Confesiones de una máscara

16 septiembre, 2007

Gospel

Mahalia Jackson - Lord's Prayer



Me Encanta Dios

Me encanta Dios. Es un viejo magnífico que no se toma en serio. A él le gusta jugar y juega, y a veces se le pasa la mano y nos rompe una pierna o nos aplasta definitivamente. Pero esto sucede porque es un poco cegatón y bastante torpe con las manos.
Nos ha enviado a algunos tipos excepcionales como Buda, o Cristo, o Mahoma, o mi tía Chofi, para que nos digan que nos portemos bien. Pero esto a él no le preocupa mucho: nos conoce. Sabe que el pez grande se traga al chico, que la lagartija grande se traga a la pequeña, que el hombre de traga al hombre. Y por eso inventó la muerte: para que la vida - no tú ni yo - la vida, sea para siempre.
Ahora los científicos salen con su teoría del Big Bang... Pero ¿que importa si el universo se expande interminablemente o se contrae? Esto es asunto sólo para agencias de viajes.
A mi me encanta Dios. Ha puesto orden en las galaxias y distribuye bien el tránsito en el camino de las hormigas. Y es tan juguetón y travieso que el otro día descubrí que ha hecho- frente al ataque de los antibióticos- ¡bacterias mutantes!
Viejo sabio o niño explorador, cuando deja de jugar con sus soldaditos de plomo de carne y hueso, hace campos de flores o pinta el cielo de manera increíble.
Mueve una mano y hace el mar, y mueve la otra y hace el bosque. Y cuando pasa por encima de nosotros, quedan las nubes, pedazos de su aliento.
Dicen que a veces se enfurece y hace terremotos, y manda tormentas, caudales de fuego, vientos desatados, aguas alevosas, castigos y desastres. Pero esto es mentira. Es la tierra que cambia- y se agita y crece- cuando Dios se aleja.
Dios siempre está de buen humor. Por eso es el preferido de mis padres, el escogido de mis hijos, el más cercano de mis hermanos, la mujer mas amada, el perrito y la pulga, la piedra mas antigua, el pétalo mas tierno, el aroma más dulce, la noche insondable, el borboteo de luz, el manantial que soy.
A mi me gusta, a mi me encanta Dios. Que Dios bendiga a Dios.

Jaime Sabines

14 septiembre, 2007

Como una nube en la luz



Si El Hombre Pudiera Decir

Si el hombre pudiera decir lo que ama,
si el hombre pudiera levantar su amor por el cielo
como una nube en la luz;
si como los muros que se derrumban,
para saludar la verdad erguida en medio,
pudiera derrumbar su cuerpo, dejando
solo la verdad de su amor,
la verdad de sí mismo,
que no se llama gloria, fortuna o ambición,
sino amor o deseo,
yo sería aquel que imaginaba;
aquel que con su lengua, sus ojos y sus manos
proclama ante los hombres la verdad ignorada,
la verdad de su amor verdadero.
Libertad no conozco sino la libertad
de estar preso en alguien
cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío;
alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina,
por quien el día es para mí lo que quiera.
Y mi cuerpo y espíritu flotan
en su cuerpo y espíritu
como leños perdidos que el
mar anega o levanta
libremente, con la libertad del amor,
la única libertad que me exalta,
la única libertad porque muero.
Tú justificas mi existencia:
si no te conozco, no he vivido;
si muero sin conocerte, no muero,
porque no he vivido.

13 septiembre, 2007

...


Dianne Wiest
y Robert Downey, Jr. demostrando que con grandes actores, una escena en completo silencio puede tener mucho peso y decir mucho.


Al Silencio

Oh voz, única voz: todo el hueco del mar,
todo el hueco del mar no bastaría
todo el hueco del cielo,
toda la cavidad de la hermosura
no bastaría para contenerte,
y aunque el hombre callara y este mundo se hundiera
oh majestad, tú nunca,
tú nunca cesarías de estar en todas partes,
porque te sobra el tiempo y el ser, única voz,
porque estás y no estás, y casi eres mi Dios,
y casi eres mi padre cuando estoy más oscuro.

Gonzalo Rojas

12 septiembre, 2007

Caporetto



En el terreno que existía entre las primeras líneas, este paradójico efecto de destrucción alcanzaba una intensidad casi mística. Lo llamaban la tierra de nadie, y es dudoso que la creación haya alcanzado en otro lugar un estado de indigencia más vertiginosa. Cuerpos y objetos -la naturaleza misma- yacían allí en una inmovilidad sin límites, fuera del tiempo y del espacio, donde parecía haberse concentrado toda la muerte disponible. Habría que preguntarse cómo era posible hasta el hecho mismo de posar la mirada en aquel fragmento del apocalipsis; y pese a ello hay que imaginarse que en aquel paisaje se despertaron millones de hombres, durante días, y meses, y años; y eso debería llevarnos a intuir el horror inenarrable que debió de paralizarlos, en todos y cada uno de los instantes de su lucha, más allá de cualquier límite tolerable, hasta llevarlos, tal vez, a considerar hasta qué punto la muerte individual, la menuda muerte de un hombre, su muerte, era al fin y al cabo un incidente accesorio, casi una consecuencia natural, dado que ellos estaban en la muerte desde hacía ya tiempo, la respiraban desde hacía una eternidad y, en definitiva, estaban contagiados por ella ya antes de haber sido por ella golpeados, como llegó a pensar Ultimo, en el frente, descubriendo que en otro lugar la muerte sería un acontecimiento, pero allí era en cambio una enfermedad, de la que resultaba inimaginable curarse. Saldremos de aquí vivos, pero seguiremos muertos para siempre, decía.

Alessandro Baricco
Esta Historia


08 septiembre, 2007

Mirame

Cuentos Borgeanos - Mírame



La posibilidad de vivir empieza en la mirada del otro.
Michel Houellebecq

07 septiembre, 2007

El amor, esa cosa

recreación de Jardín de August Macke


Las relaciones interpersonales con todo lo que acarrean -amor, relaciones de pareja, compromisos, derechos y deberes mutuamente reconocidos- son al mismo tiempo objetos de atracción y de aprensión, de deseo y de temor; sedes de duplicidad y vacilación, de examen de conciencia y de ansiedad... La mayoría de nosotros adoptamos dos actitudes frente a esa novedad de "vivir sin cadenas", de relaciones "sin compromisos". Las codiciamos y tememos al mismo tiempo. No daríamos marcha atrás pero nos sentimos a disgusto donde estamos ahora. No sabemos qué hacer para tener las relaciones que deseamos y, lo que es todavía peor, no estamos seguros de qué tipo de relaciones deseamos.
Creo que Erich Fromm captó el dilema en su esencia cuando observó que "la satisfacción en el amor individual no se puede alcanzar... sin verdadera humildad, valentía, fe y disciplina". Pero añadía enseguida, con tristeza, que, "en una cultura dichas cualidades son raras, la capacidad de amar debe seguir siendo un extraño logro". Amar significa estar decidido a compartir y mezclar dos biografías, cada una con su diferente carga de experiencias y recuerdos y su propia singladura. Por la misma razón, significa un acuerrdo cara al futuro y, por lo tanto, cara a ese gran desconocido. En otras palabras, como observó Lucano hace dos milenios y repitió Francis Bacon muchos siglos después, significa entregar rehenes al destino. También significa hacerse dependiente de otra persona dotada con una libertad parecida para elegir y con voluntad para mantener esa decisión, y, por tanto, de otra persona llena de sorpresas, imprevisible.
Mi deseo de amar y de ser amado sólo puede culminarse si una auténtica disposición a que sea en las "duras y las maduras" lo respalda, a comprender mi propia libertad si fuera necesario, de modo que la libertad de la persona amada no sea violentada. En el Banquete de Platón, Diotima de Mantinea... le señala a Sócrates, con el acuerdo incondicional de este último, que el "amor no es para la belleza, como piensas", "es para engendrar y dar luz en la belleza". Amar es desear "engendrar y procrear" y, por tanto, el amante "va buscando de un lado a otro la cosa hermosa en la que poder engendrar". En otras palabras, el amor no encuentra su sentido en el ansia por cosas conclusas, terminadas y fabricadas de antemano, sino en la urgencia por participar en y contribuir a que dichas cosas se hagan realidad. El amor es afín a la trascendencia; sólo es otra denominación del impulso creativo y, como tal, está plagado de riesgos, como los están todos los procesos creativos, que jamás se saben dónde van a ir a parar.
Terminamos con una paradoja. La esperanza de encontrar una solución guió nuestro inicio sólo para toparnos con nuevos problemas. Buscamos amor para encontrar socorro, confianza, seguridad, pero los aciagos y tal vez interminables trabajos de amor gestan a su vez confrontaciones, incertidumbres e inseguridades. En el amor no hay apaños rápidos, soluciones de una vez por todas, seguridad alguna de perpetua y total satisfacción, no hay garantía de que te devuelven el dinero en caso de que la satisfacción total no sea instantánea y en estado puro. Todos esos mecanismos anti-riesgo de pago que nuestra sociedad de consumo nos ha acostumbrado a esperar no se dan en el amor. Así que tenemos tendencia a aplanar a golpes nuestras relaciones al estilo "consumista", el único en el que nos sentimos cómodos y seguros.
El "estilo consumista" pide que la satisfacción haya de ser, deba ser, es mejor que sea, instantánea, mientras que el valor exclusivo, el único "uso" de los objetos, es su capacidad para dar satisfacción. Una vez cesa la satisfacción (debido al desgaste natural de los objetos, debido a los conocidos y aburridos que nos resultan, o debido a que hay otros instrumentos sustitutos en oferta, menos conocidos, que no hemos probado (y, por tanto, más estimulantes), no hay motivo para atestar la casa de cachivaches tan inútiles.
Uno de los regalos de Navidad siempre favoritos de los niños ingleses es un perro (normalmente un cachorro). Al hablar de la grave crisis que atraviesa esta costumbre, Andrew Morton comentaba recientemente que los perros, conocidos sobre todo por su capacidad de adaptación al entorno y a las costumbres humanas, deberían "empezar por reducir sus expectativas de vida de quince años aproximadamente a otra cifra más acorde con la duración de la atención en el mundo moderno: digamos unos tres meses" ... Un alto porcentaje de gente que pone a sus perros de patitas en la calle "se ha librado de ellos para hacer sitio a otro perro que esté más de moda".
Lo mismo que sucede con los animales para con los hombres mascota. Barbara Ellen, una columnista del Observer Magazine, escribe de "plantar a tu pareja" como de algo normal. "Se ha dicho que la muerte es una parte importante de la vida. ¿Acaso la ruptura no es igualmente una parte importante de la relación?" Parece que romper se considera ahora un acontecimiento tan "natural" como es la muerte en relación con la vida, ya que las relaciones,una vez codiciadas como pasadizo a la eternidad de humanos mortales, se han vuelto fisíparas y mortales; efectivamente infestadas con unas expectativas de vida muchas veces más corta que la de los individuos que las han formado sólo para volverlas a romper ...

Animales o humanos, parejas o mascotas... ¿Importa algo? Todos sirven para lo mismo: satisfacernos (al menos para eso los conservamos). Si no lo hacen, no tienen sentido en absoluto ni, por tanto, razón de estar aquí ... No obstante, no se menciona que como el comienzo de una relación de pareja requiere el consentimiento de dos y para acabar con ella basta con la decisión de uno solo de sus miembros, toda relación de pareja está condenada a ser blanco constante de ansiedad. ¿Y qué pasa si el otro se aburre antes que yo? ...

La disponibilidad de una salida fácil constituye en sí misma un obstáculo formidable para la consumación del amor. Hace que sea mucho menos probable el tipo de esfuerzo a largo plazo que dicha consumación requeriría, que se sea susceptible de ser abandonado mucho antes de alcanzar una conclusión gratificante, rechazado por "no salir mucho a cuenta",molesto por un precio que uno considera que no hay motivo alguno para pagar, teniendo en cuenta los sustitutos aparentemente más baratos asequibles en el mercado.

Si nuestros ancestros fueron formados y entrenados, sobre todo, como productores, a nosotros se nos forma y se nos entrena primero como consumidores y luego como todo lo demás. Los atributos que se consideran ventajas en el productor (la adquisición y la retención de hábitos, prontitud para demorar la gratificación, estabilidad de necesidades) se convierten en los vicios más impresionantes para un consumidor...
El futuro siempre ha sido incierto pero nunca se ha tenido la sensación de que su naturaleza volátil y caprichosa era tan indisciplinada como en el moderno mundo líquido del trabajo "flexible", de los frágiles vínculos humanos, de los estados de ánimo fluidos, de las amenazas flotantes y de una imparable cabalgata de peligros camaleónicos. Nunca se ha tenido la rotunda sensación de que el futuro es, como ha sugerido, Emmanuel Levinas, el "otro absoluto", inescrutable, impermeable, inconocible, y, al final, fuera del control humano.
En un mundo en donde se practica la falta de compromiso como estrategia vulgar de lucha de poder y de la autoafirmación, hay pocas cuestiones en la vida (en caso de que haya alguna) que se puedan predecir, sin temor a equivocarse, que van a durar ... El pensamiento a largo plazo (y aun más las obligaciones y compromisos a largo plazo) se perfila como "sin sentido". Todavía peor, pensamiento, obligaciones y relaciones a largo plazo parecen contraproducentes, categóricamente peligrosos, un paso insensato, un lastre que hay que tirar por la borda y que en primer lugar hubiera sido mejor no subir a bordo...

Zygmunt Bauman
Identidad

05 septiembre, 2007

Dos hombres...

Steve Walker - La llave griega (2003)

Dos hombres que se cruzan no tienen otra opción más que golpearse con la violencia del enemigo o con la dulzura de la fraternidad. Y si al fin y al cabo eligen evocar en el desierto de esa hora lo que no está ahí, el pasado, lo soñado o lo que falta, es por no enfrentarse directamente a lo demasiado extraño.

Bernard-Marie Koltès
En la soledad de los campos de algodón

03 septiembre, 2007

Id

Recreación de Jardín de Joan Miró


ENCARGO

Id, cantos míos, al solitario y al insatisfecho,
id también al que tiene los nervios deshechos, al esclavo de las convenciones,
mostradles el desprecio que siento por sus opresores.
id como una gran ola de agua fría,
mostradles mi desprecio por los opresores.

Hablad contra la opresión inconsciente,
hablad contra la tiranía de la falta de imaginación,
hablad contra las trabas.

Id a la burguesa que se está muriendo de tedio,
id a las mujeres de los suburbios.
id a los espantosamente casados,
id a aquellos cuyo fracaso está oculto,
Id a la desgraciadamente casada,
Id a la esposa comprada,
id a la mujer impuesta.

Id a aquellos de lujuria exquisita,
id a aquellos cuyos delicados deseos son frustrados,
id como plaga contra la estupidez del mundo;
id con vuestro filo contra esto,
reforzad las cuerdas sutiles,
llevad confianza a las algas y los tentáculos del alma.

Id amigablemente,
id con palabras sinceras.
Estad ávidos por hallar nuevos males y un nuevo bien,
estad contra todas las formas de opresión.
Id a aquellos que están embotados por la madurez,
hacia aquellos que han perdido su interés.

Id al adolescente que es sofocado en familia...
¡Oh! ¡Cuán asqueroso resulta
ver tres generaciones en una misma casa reunidas!
Es como un árbol viejo con renuevos
y con algunas ramas podridas que ya se caen.

Salid a desafiar la opinión popular,
id contra esta servidumbre vegetativa de la sangre.
Estad contra cualquier clase de opresión.

Ezra Pound